El carnaval  es una fiesta muy colorida y de mucha tradición en Chalcatongo de Hidalgo,  donde el principal personaje es El Chilolo,  del Carnaval, este carismático personaje literalmente es el alma de la fiesta, ya que representa juntamente con la maría y el viejito la tradición carnavalistíca de Chalcatongo.

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El Chilolo de Chalcatongo se distingue por su vestimenta la cual consiste: iniciando por la cabeza, de un sombrero de palma cual va sujeto el tapasol, porta una camisa blanca de manga larga, sobre la cual va un chaleco negro tipo sastre, pantalón negro de tela corte formal, el cual a su vez termina dentro de las calcetas blancas y como calzado, botines negros, dejando para el ultimo la parte más esencial, las mascara, artesanalmente hecha de cuero, con barbas de chivo y pintada cuidadosamente a mano, todos estos inasibles elementos conforman al único y singular Chilolo de Chalcatongo, que con la alegría de su danza se caracteriza.

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Todo inicia en los primeros días del mes enero, para ser más exactos en los días de la celabración de la virgen de los remedios, en la comunidad de Abasolo, esto es: ya por tradición, el banderazo de salida, a partir de este momento inicia el carnaval. Previamente a todo esto, el Capitán, que es la persona encarda de realizar la celebración y a quien se le ha confiado el bastón de mando, convoca a sus “chilolos” que son personas de la misma comunidad entre los cuales se encuentran sus familiares, amigos y conocidos, que portaran el tradicional traje de “chilolo”.

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 Otra labor sumamente importante que corre a cargo del Capitán, es  pactar con el grupo de cuerdas, quienes serán los encargados de enmarcar la danza de los “chilolos”, esto ocurre en el centro de Chalcatongo, así como en cada una de sus 18 agencias. El recorrido inicia en la casa del Capitán, que a partir de ese momento se vuelve el punto de convergencia para todos los “chilolos” desde el primero hasta el último de los días, la trayectoria por la comunidad consiste en recorrer las calles acompañados de los músicos, ejecutado sus prodigiosos pasos con arduos zapateos  y gritos, deteniéndose en cada una de las casas para alegrar a los habitantes de las misma con la picardía de sus bromas e invitándolos a bailar con ellos, en un ambiente de alegría y jubilo. A cambio del momento de fervor obtenido, las personas de la casa obsequian a los “chilolos” toda clase de dadivas: que pueden ir desde bebidas tradicionales como el pulque y el tepache, cervezas o refresco o bien puede ser tortillas, granos de todo tipo: maíz, fríjol, arroz, Lo que se puede lo consumen en ese momento, lo de mas es llevado a la casa del Capitán, donde será utilizado para realizar las viandas que serán ofrecidas a las personas durante los días de la fiesta.